Estás para siempre
En una noche de noviembre
Veo las imágenes del pasado
Cambiantes de muchos lugares
Lugares complejos como tú
Donde nos podríamos haber ido
Donde la tristeza habitó y el halo llegó
El vahído de la pestilencia antigua
En que crecías en tristeza y en masa
Y las partículas de tus pupilas idas
Te llevaban al silencio y al bocado.
Sin embargo, México, Miami, Paris
Te mostraron las posibilidades únicas
De olvidar el luto, de vivir de nuevo
De ser capullo tardía, pero capullo.
Y te digo melena indómita, ¡levántate!
El horizonte te espera, estás para siempre
Deja los puertos y las naves, cambia ahora,
Deja el negro del luto y el morado de cuaresma
Y resucita como nunca en tu horizonte
Junto al mío, junto al hito, junto al sueño
Ya va pasando la pesadilla y estás para siempre
En el junco, en el pájaro, en la risa y el llanto
Pon fin al silencio y a la mazamorra nortina
Ven al sur con los prados, los volcanes humeantes
Y los lagos llenos de esperanza donde te vi
Ya treinta años atrás, en el arco iris del Budi.
Estás para siempre y puedo escuchar tu respirar
Para siempre, en el presente y en el futuro
Puedo escucharte, puedo sentirte, y puedo amarte.
sábado, 14 de noviembre de 2009
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